Vamos hacia el buen tiempo; esta misma semana entramos en primavera y este año más que nunca, quien más y quien menos, tenemos ganas de disfrutar del aire libre. Y de la estrella de las reuniones de jardín, la barbacoa.
Hoy en día en prácticamente ningún lugar de España, está permitido realizar una barbacoa en el campo, precisamente por el riesgo de incendio, excepto en algunos puntos construidos para este fin (áreas recreativas, campings, etc), solo en determinadas comunidades autónomas y generalmente fuera de las épocas de más calor.
Pero, aunque una barbacoa se realice en un lugar adecuado para esta actividad, y con todas las medidas exigidas por la normativa, o si la realizamos en nuestro jardín, siempre tenemos que tomar las medidas necesarias para que sea una actividad segura para nosotros, nuestro entorno o nuestro hogar.
¿Cómo prevenir el riesgo de incendio cuando hacemos una barbacoa?
Aunque pensemos que las probabilidades de provocar un incendio accidental por una barbacoa encendida son pocas, no es así. Cualquier chispa, cualquier ráfaga de viento, o un simple descuido puede provocar que el fuego se descontrole. A continuación os dejamos unas pautas para evitarlo, y que su utilización sea totalmente segura.
- Primero de todo, no dejar nunca la barbacoa encendida sin vigilancia constante.
- La barbacoa debe estar siempre situada en un espacio abierto (aparte del riesgo de incendio, está el de intoxicación debido al monóxido de carbono), lejos de cualquier material combustible que pudiera propagar el fuego, y asegurarnos que ese día no hay viento excesivo. Tampoco se recomienda en días de altas temperaturas.
- No prender con papel, líquidos inflamables o material que no esté especialmente indicado para ello, ya que puede generar grandes columnas de humo.
- Apagar siempre la barbacoa totalmente tras terminar de cocinar. Aunque solo quede alguna brasa, podría ser suficiente para desencadenar un incendio.
- Nosotros recomendamos siempre, que aunque se sigan rigurosamente todas las indicaciones anteriores, en todos los domicilios haya al menos un extintor de mano, para que en el caso de incendio, el fuego pueda ser extinguido con rapidez antes de su propagación. Llamar rápidamente al 112 si la estancia se llena de humo o el fuego se descontrola.
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